Cuántas veces es necesario pasar esto...
Cuando pensaba que era inmune,
Que ya lo había superado,
Descubro que soy de carne y hueso.
Que los poros de mi piel se desarman con una sola mirada,
Que mi piel se estremece con sólo imaginar,
Y me siento mal.
Deseo no sentir está sed de un cuerpo que alborote mi deseo,
Deseo no querer tenerlo en mis brazos y moverme entre sus piernas,
Dejar que me azote sin piedad hasta gritar su nombre una y otra vez,
Que me someta a sus más bajas pasiones y me despoje del pudor que hoy vive en mí.
Deseo alejar esas escenas de mi mente, porque en el fondo es lo que mi corazón quiere.
Dejarme llevar en el vaivén entre los cuerpos llenos de deseo y ardiente pasión.
Para después sentirme vacía porque busco el amor.
Y caer de nuevo en la sed de saciar mi instinto,
Sintiéndome vacía,
Sintiéndome sucia,
Llenandome de dolor, de amargura.
Quejándome porque caí de nuevo,
Ansiando borrar el tiempo ante algo que debería ser honesto.
Y al final, ser víctima de mis propios paradigmas,
Ser víctima de mis prejuicios,
Matandome de a poco,
Ahogándose de nuevo,
Y aunque no es real, mi mente ya me jugó esta nota mental.
-Joss-