Pienso un mañana distinto al presente
como si todo es hermoso y tranquilo;
sueño que el odio del medio aniquilo,
dándole un mundo amoroso a la gente.
Quiero que el verso se lea en la fuente
clara y con agua que siempre asimilo
agua que corre muy lenta en sigilo
porque irrigando la nueva simiente
va por los valles, terreros y cumbres
siempre irrigando la tierra descrita
tanto que el fruto de buenas costumbres
va verdeciendo la flor que marchita
tiene otra vez su color con sus lumbres
donde la gente no sufre más cuita.
¡Cuánto amor necesita,
el ser humano que habita este mundo,
porque el amor lo percibo infecundo!