Ahí, delante de todos,
Cerré los ojos e imaginé que no había nadie,
Estaba curioso, parecía poseído,
Pero, me congelé, no era el momento,
O solamente, no era para nosotros,
Pero estaba imponente, según tú, gallardo,
Te sentías tan pequeña, e indefensa,
No podías articular palabra,
Solo esperaba una señal,
Eso jamás lo olvidarás.
¿Será hoy?, tal vez no en esta vida.
Jrea:. Caracas, 10 de agosto de 2022