Anne Black

Olvidame

Me pregunto si aún piensas en mi o si solo yo lo hago... si recuerdas nuestros encuentros, y si me extrañas cuando lo haces. Nuestras charlas y payasadas a escondidas, las risas y caricias que nos hacíamos cuando nacía la necesidad de expresar a través de ellas lo que sentíamos el uno por el otro, miradas que lo decían todo y mensajes de textos para satisfacer un poquito el deseo de estar juntos. 
No se si me recuerdas alguna que otra noche, sin embargo yo sí lo hago, apareces por mi cabeza muy seguido y me gustaría escribirte y saber de ti, aunque no deba, pues tu mujer está contigo y no sería correcto. Así que me reprimo e intento desahogarme escribiendo una carta que jamás llegara a tus manos, una carta que al estar lista quemare junto con el sueño de amarte como nunca te han amado, como nunca he amado a nadie. 
Ahora debes estar con ella, acariciando su piel, solo espero que no lo hagas pensando que soy yo, porque sería lamentable, aunque debo confesar que eso también lo hago, yo también lo acaricio y lo beso creyendo que eres tú, viviendo una mentira para sobrevivir mientras espero la siguiente vida con la esperanza de que allá estés para mi, mientras observo en mi memoria tu rostro, nuestros abrazos y besos, y sonrío con toda sinceridad, amándote mucho y para siempre, entristecida y nostálgica quiero verte una vez mas, despedirnos como merecemos para luego echarnos al olvido pero sin nada pendiente.
Amémonos mi amor y después olvídame, olvida ese amor que sé que sientes y no pudiste asumir cuando te lo implore, olvida que yo también lo hare.