Este valle es región excepcional,
una grandiosa joya natural.
Pronto emerge la flora primorosa
y una fauna diversa y fabulosa.
La montaña es sublime y misteriosa
creada por la mano poderosa.
En el lugar se siente mucha paz,
este ambiente habitual siempre solaz,
se convierte en tesoro tropical.
Es Ujarrás y Orosi portentosa
zona, curiosa, alegre muy vivaz.
Las miradas se pierden extasiadas
en las bellas honduras donde hadas,
con su magia dejaron los colores,
pintando las corolas de las flores
de las plantas que lucen sus verdores,
y que al hombre provocan los amores.
Es el valle de Orosi, edén fastuoso
igual el de Ujarrás esplendoroso.
El río serpentea por quebradas
entre senderos llenos de frescores,
a veces con el clima neblinoso.
Tonos naranja y rojo por doquier,
la fantasía empieza a florecer.
Al fondo el Tapantí siempre lluvioso
con un ecosistema fabuloso,
un lugar sosegado y silencioso
roto por un riachuelo rumoroso.
Refugio de grandezas terrenales
que son sus excelentes credenciales.
Si el turista un lugar debe escoger,
debe visitar este valle hermoso,
colmado de bellezas naturales.