Nunca hubiera imaginado
la fuerza de nuestro amor
domina los sentimientos
se adueña de tu interior.
Negar lo que es evidencia
que nos mueve la pasión
sería ignorar la esencia
que alimenta esa razón.
Un huracán desatado
nos activa por momentos
la fuente ese instinto básico
que son nuestros pensamientos.
Que indescriptible sentir
cuando en el alma se queda
esa sensación de ardor
que por adentro te quema.
Una efímera ilusión
un deseo pretencioso
pues realidad o ficción
es algo maravilloso.
Classman