Desnuda, como las musas de Neruda
desnuda, como una fruta madura
desnudas, como mis manos y mis pies
desnuda, mi alma al descubierto
desnuda la herida en mi piel.
No es que no tenga mis ropas
es que soy como un espejo en la bruma,
en la bruma del querer.-
Desnuda, como una espesa nube
que desvaneces su textura
para desparramarse y llover.
Desnuda en la mente de esta mujer;
la música que captura mis nervaduras
mi corriente sanguínea y los silencios
en mis abismo como la fruta y la miel.
Desnuda, en la médula de una duna,
se incrusta y se ajusta como la pluma al papel
desnuda la lágrima salada que como agua resbala
y humedece la espalda de un atardecer.
Desnuda, de egos de celos y dolor
por eso desnudo mi alma
y siento apertura para querer
la desnudes del alba y del amanecer.
Desnuda, como las musas de Neruda
pero con vocablos despiertos
que saben de su propia desnudez .
Desnuda, como una ninfa blanca
que sabe a menta
cortando la hierba
adornándose.