Andaba el poeta de paseo por la luna del otoño, en silencio y nostalgia,
clamando al cielo, devuelva a Calíope, musa inspiración de sus poemas
No ha descubierto el perdón en sus versos, estrofas de tristeza y lamento
Callado, alejado de las sombras oscuras de la pluma necia en sus versos,
gaviota, eclipsada en el oleaje, de la marea, incontenible de su arrogancia;
manantial de cataratas de lamentos, desventuras, de su alma y us adentros,
lanzando a los cuatro vientos, vierte, al espacio infinito, lo mejor de su talento
Sumergido, en el profundo abismo del mar de necesad, y de supina ignorancia
Agotado, vaga en el desierto, sediento de saciar la inclemente sed de su miseria