Joseponce1978

No nos hablaron del fracaso

Por explicarnos como usar las alas

sin enseñarnos a caer primero,

perdimos el espíritu escudero

capaz de inmunizarnos de las balas.

 

No nos hablaron de las aguas malas

dispuestas a astillarnos el velero,

y al naufragar cruzando el mar de enero

la niebla se tragó nuestras bengalas.

 

Crecimos ignorando la importancia

de ver al vendaval llevarse un globo

y cuando nos abrió la vida paso,

 

de pronto nuestra escasa tolerancia

a vernos engullidos por el lobo

nos impidió librarnos del fracaso.