Apague las luces y deje entrar la tenue luz de mi amiga la luna; prendi una pequeña lámpara abrí el cajón que cada vez rechina más, deje el mundo terrenal hasta llegar a otra dimensión deje a cargo al corazón que rápidamente tomo el control de mi mano y después de todo mi cuerpo, despues de mi viaje vi frente a mí los versos más hermosos que he escrito de amor...