Matias 01

Afinidad

Una pareja de zancudos beben

-con sus portátiles lanzas-

nuestra liquida piel llena de costras agridulces

y aclimatado al polvo

de furiosas jornadas con sollozos;

 

Brindan con toda su sed,

dejando a un lado su hambre, beben

por capítulos de vértigo,

como si bebieran el vino de los dioses

en el universo.

 

Luego saltan, como pesadas cometas

por el aire,

vuelan por entre las olas atmosféricas

como cetáceos del ocaso,

con esa mecánica voracidad

de su naturaleza.

 

Un hombre a dos manos se rasca

y con su acérrimo antebrazo

aplasta a su metáfora

que queda atravesado en su propia astilla;

¡La otra tiembla de miedo y se va!

Perseguida lentamente

en la inmensa soledad.

 

Un instante es la distancia

de dos dedos

que va del goce hacia el calvario.

¡No me digan que uno hace su destino!

El crepúsculo llega

cuando la soledad y el silencio

se instalan para no irse.