Rapidito pasa el tiempo,
ocultando que es finito,
cual si un día un año fuera
y la cuesta un caminito.
Y en el camino dejamos
las querencias que vivimos ,
los lugares, los momentos,
y las fuerzas y los mimos.
Dejamos correr la vida
y se va sin mucho tino
o se pierde entre las quejas
o se llena como un rio.
Después, acabando el vaso,
mirando atrás siempre digo:
¿ por qué el ayer no es ahora
y el ahora el infinito?
M. feria(2022)