EL QUETZAL EN VUELO

PARA DEJAR DE SER QUIMERA

Cuando no veas el clavel en el jarrón, el verso en tu cuaderno y el café humeante esperándote; no pienses que me escondo, que me he ido. Es que pasé del papel, al pensamiento, a tus sueños. Sigo teniendo los mismos cómplices, el mismo lenguaje encriptado, el anhelo. Sigo dando la batalla para que dejes de ser quimera.

 

He colgado en mi pecho, como rosario, cada estrofa dicha y escrita, para que sacie mi fe y esperanza de que un día dejen de rodar por las paredes de mi corazón mis anhelos y si el amor hace milagros, yo espero que me cumpla, como yo cumpliré mi condena al estar sin ti, este tiempo, apaciguando esta desazón con mi guitarra.

 

Sigue ahí, acompañando mis letras, junto a los días de agua, esperando las mañanas para leernos. Toca mis miedos con tus manos, alumbra el camino incierto con tu mirar. Acorta las distancias, dame tu amor como escudo, besa mis versos, endulza la hiel, que anuda mi garganta, consuélame con tu paz y guardame el corazón.

 

Antes de la internet, solía viajar en un suspiro, en un pensamiento, en la ilusión de estar en el corazón exacto, luego viajamos en el corazón de un colibrí, en la nube blanca, en la luz de la luna, en la sonrisa de un niño; en la alegría de un nuevo día. Hoy basta prender el computador, encontrar tus versos y sonreír todo el dia.

 

Ella no es responsable, de que mis versos cansados de tanto correr por sus hojas, hayan encontrado en mis sueños, la ternura para acariciar su alma y SÍ, me culpo de haberlos leído con el corazón y los tome, pensando que eran para mí, pues vi mi nombre en ellos .No dedicados,no con sus letras, pues lo leía con el corazón

 

LENNOX

EL QUETZAL EN VUELO