25.

CapĂ­tulos

A veces, admiro desde la lejanía cómo se pronuncia en mi vida cada nuevo capítulo, como un Best Seller recién premiado, popular, que todo el mundo quiere leer pero que cuando lo tienen en sus manos se empachan de pereza porque nunca tienen tiempo. 

 

Yo simplemente, admiré desde la lejanía como el destino se iba cumpliendo, sin pereza ni ataduras.

 

Como, hasta las cosas menos odiadas por el ser humano, llegaban atacando el camino y aún cuándo nos empapaban las lágrimas, pensábamos, \"así lo quiso Dios\", como si no hubiesen soluciones, como si no existiera culpa alguna para la mayoría de los males que tenemos. 

 

A veces, me gusta sentarme a mirar cómo van pasando las páginas del libro de mi vida, a veces hasta sorprendida de la maravillosa mente que escribió mi destino, deseando preguntar al aire porque decidió que era un buen momento dejar salir el dolor y reformular mil preguntas que siquiera tenían respuesta, preguntas que ellos sabían que acabarían corrompiendo mi persona pero que por el morbo de la curiosidad decidieron preguntarme. 

 

Quizá, es que no querían sufrir solos.