Nos deja agosto,
se marchan muchos versos
inacabados.
Pero se quedan
sus pétalos preciosos
en las retinas.
Ratos inmensos,
murmullos de unos labios,
enamorados.
Se va el verano
y quedan, de sus horas,
muchos recuerdos.
Unos alegres
con otros agridulces
y algunas sombras.
Pero el resumen
es dulce y sugerente
como un buen néctar.
Y aquí quedamos
las sombras y los sueños
de los poetas.
Versos y besos
ahogados y buscados
por tantos labios.
Voces silentes,
abrazos temblorosos
almas sedientas.
\"Y volverán,
te dices, esos ratos
y un nuevo agosto\".
Rafael Sánchez Ortega ©
26/08/22