De la vida todo se habla
De la muerte nada se escucha
Los sitios de los sueños se encarcelan
Y la sed de lo idolatrado se manifiesta
Divago ebrio por un mundo senil y oportuno
Encarcelo la cúspide maestre en mi corazón no disimulo
Mil egos apasionados se encadenan a mi alma
Y proyectas sapiencia bien dada, tómalo con calma
700 oportunidades desmenuzadas se alientan
Por un amor perdido oh que horrible sentencia
De algorítmicos mensajes
Do códigos y reflejos
¡Qué chantaje!
La paz del mundo se halla en la mente
Mente no cuestionada por los ángeles de madera
Ilustramos, sentenciamos
Recreamos, practicamos
Poéticamente la sed se dibuja en pequeños fragmentos
Del viento, no advierto es cuestión solo de mi aliento
Aliento de fuerza de vida
De ¿muerte?
Mi pluma se enardece
Es fuerte, es presente
Aliente ante la vida no es pretexto condescendiente
De fervor a favor de holocausto enternecedor
Paradojas, metáforas
Amor perdido en los que digo
Predigo y consigo obtener el pasado de una visión
Visión real de un mensaje incrustado, que gran ovación
Fin.