En un añorante escrito
recuerdo las travesuras
nuestras enanas figuras
¡un pasado tan bonito!
Sonrisas o un simple grito
pagaban nuestras facturas,
papá sanaba fracturas
al jugar al caballito.
Cirugía a los gusanos,
los amagues a papá,
la pelea con hermanos
Añoro lo que no está,
como ensuciarnos las manos
o el enojo de mamá...
Entre mis recuerdos flojos
mi alma expectante escudriña
¿qué sería de la niña
que me enamoró sus ojos?
Fue dueña de mis sonrojos
por su piel blanca y lampiña
la enfadaba por rapiña
molesta por mis antojos.
Sin temores del futuro
con amigos y juguetes
sonreímos sin apuro.
Añoro construir cohetes
las épocas de aire puro
sin salarios ni grilletes.
...s. ....l