Un día en que el Sol hablaba con las flores
las olas y el mar jugaban con el viento
un día que es imposible olvidarlo
te vi parada allí tan linda como un sueño.
Tus ojos dos luceros peregrinos
Recorrían con avidez el horizonte infinito
tus purpurados labios algo me dijeron
y ya no supe más de mí.
Desde entonces el Sol sale de noche
la Luna juega con mis sueños
y las calles están frías y vacías
será que todo está revuelto para mí?.
Camino sin saber mi destino
pinto tu rostro en el alocado viento
mis manos solo escriben tu nombre
y los suspiros acosan mí existir.
Siento amarte como a una diosa
Quiero ser el dueño de tus sueños
fundir tu alma con la mía
quiero ser parte de tu historia
Si eso no es posible amada mía
enséñame a arrancarte de mi alma
entrégame a los brazos de la muerte
Para hundirme en el mar del olvido.
Lima agosto 28 del 2022
DERECHOS RESERVADOS