Sabemos que podemos detener el tiempo
Que un segundo puede ser ilimitado
_esperando tu voz_
Existe un mundo de silencios
Uno donde nada se puede hacer
Ilusión viviente o fantasía soterrada
Lo que queremos se encuentra empañado
Comido por el aliento al parecer perpetuo
Y solo existe una devoción por compartir
Estamos presos por los sentidos
Los hemos entregado al misterio del capricho
Y ahora morimos de sed irremediablemente
Sabemos que el pasado es una ola suspendida
Pero que nunca caerá
Por más mamíferos que busquen su extinción
Hemos dejado de beber en los arroyos
Apostamos por la sed del corazón
Y no hay vocal que te defina
La piedad evoca a los hombres
Los aguijonea día a día
Y los induce a una absolución escrita
Y son las experiencias
Las que coronan nuestra espera
Queriendo decidir en nombre nuestro