Me declaro culpable por enamorarme de ti,
soy responsable de haberme fijado en ti,
mi corazón es causante por quererte tanto así,
pero es que contigo todo mi ser se siente feliz.
Me declaro culpable de darte amor,
por quererte con el alma, con el corazón,
por sentir esto que me llena de emoción,
culpable soy por sentir tanta pasión.
Soy culpable de imaginar que soy tu dueño,
de anhelar tenerte y vivir nuestro sueño,
culpable por admirarte con devoción,
pero es que cuando te veo pierdo la razón.
Culpable soy de perderme en tu mirada,
de desear tus labios en cada madrugada,
de pensar en ti y sonreír de la nada,
de esperar siempre a tu llegada.
Culpable soy así que condéname,
a tus caricias, a tu suavidad,
a tu aroma, tu forma de besar,
a tu peculiar manera de amar.
Me declaro culpable mientras tú seas mi cárcel,
si es así, con gusto me condeno de amor por ti.