Ser santos sin ningún milagro en la memoria
Ser ángeles del día o de la noche
Sostener posibilidades constantemente
Podemos destruir para volver a crear
Sabiendo que los cambios son hermanos del tiempo
No queremos más misterios que nos limiten
Sabemos lo temporal de las nubes
Que la frescura de su presencia
Se condice con el impulso de ir (de moverse)
Qué no estamos entendiendo
Qué actividad no la repetimos sin pensar
Y qué es lo que desplaza esta ceguera selectiva
No tenemos la sangre de titanes
Ni las antorchas de los destinados
Y sin embargo cuál es nuestro papel en la mesa
Aves mensajeras
Caudales incesantes
Manantiales de vino y espuma
Lo que ofrezco es una mirada clara y oscura