Caminas con los pies desnudos,
las duras piedras te hieren,
a veces, la piel,
a veces, la carne.
Cuando regreses a este lugar,
has aprendido a caminar,
tus pies, no sufrirán.
A veces las heridas,
a veces las cicatrices,
son parte del tiempo
que el amor necesita.
El ciruelo asomado
a tu ventana.
El viento desatado,
las flores caen,
los frutos caen,
has perdido algo de vida.
Evita que caigan,
Así, escogerás lo que gustas.
Quizás tus pies,
tengan cicatrices,
como tu alma.
Aprende a escoger,
tus ideas,
alienadas con tu corazón,
como astros ya milenarios.
Caminas con los pies desnudos,
las pequeñas cicatrices,
hechas en tu caminar,
construyen los eslabones
de un amor,
así las flores y frutos,
serán parte de tu tiempo
serán parte de tu habitación.