Que a Dios ponga si me muera,
Una cruz tallada en oro,
Otra en cuarzo y por última en estalactita.
Que me lleve al más sagrado de sus templos y allí me de cobijo.
Y si no acierto a vislumbrar sus entresijos,
Que me diga entre risas que es por ser su hijo.
Que me lleve de paseo por el cielo,
Que me hable de su estampa, de su carisma y de su anhelo.
Que con sólo rezarlo toque el cielo,
Y que de su bondad y carisma me empapen.
Dando como resultado un alto crecimiento.
Ser más bondadoso y amable con el tiempo.
Que no pase nunca, ni siquiera de moda,
Y que todo lo que haga sea aquí y ahora.
Que a dios ponga si me muera,
Un poco de pan y un poco de vaso con vino,
Y que por querer coma la última cena de mi destino.
Que no se preocupe, que por él recorro el camino,
Doblo la esquina y tomo la cruz,
retomando así su pasado y haciéndolo mío con cuidado.
Y que dios me perdone si no soy perfecto,
Y que dios me perdone si no soy correcto,
Y que dios me perdone si no soy recto,
Y que dios me perdone los pecados,
Porque peco a menudo y demasiado.