Tocar fondo es ganar...
No se trata
de rendirle culto
al pesimismo,
a la sumisión,
a la claudicación,
a la crisis.
No!
Se trata de resaltar
que si la vida
de la mayoría
de los venezolanos
es infrahumana,
que se debate
entre la pobreza crítica
y la pobreza extrema,
con una clase media
depauperada,
proletarizada
y agónica,
es menester dejar
el conformismo
a un lado,
armarse de ciudadanía,
conciencia nacional
y atizar el fuego
de la libertad.
Admitir el status
de la crisis
es tener conciencia
del tamaño
del compromiso.
Esta senda
constituye el pedestal
de la épica humana
y por ella, la acción
se ha de honrar
en los instantes
en que se tenga
que confrontar.
Cuando se toca fondo
no hay nada
que perder,
pero sí,
mucho que ganar.
Lo positivo
de un presente malo
es que convoca
a la reunión,
a la concertación,
que busca el bien
para encontrar
la solución.