Tus alas pequeña aumentan su tamaño
el fruto del árbol se desprende al madurar
por implacable es cruel el paso de los años
estás creciendo y eso nadie lo puede evitar.
Pequeña inocente de fácil ternura
ojos soñadores que miran sin ver
el beso en tu boca es todavía miel pura
tu cuerpo un capullo que comienza a florecer.
Tus pupilas brillan hoy un poco más que antes
encendiendo la tarde cuando el Sol está al caer
el tiempo del amor no parece tan distante
y mi niña mimada es ya casi una mujer.
Si todavía me veo cambiando pañales
ayudándote en el agua a la hora del baño
enseñándote en la mesa a tener buenos modales
o soplando velitas en cada cumpleaños.
Pequeña tu imagen de ayer se me pierde
mirando tus fotos la vuelvo a encontrar
comparo los gestos, la altura, el cabello
y retengo una lágrima que quiere brotar.