Mariano Torrent

Afuera es jueves

Libro: Apotegmas en el desierto (2014)
 
Afuera es jueves, y una voz anónima
completa la tercera decena
de los misterios luminosos.
 
Afuera es una gota de saliva
del cielo, el caos parsimonioso
de la vida consagrada al incordio.
 
Adentro es cualquier otro día con sabor
a tedio, vergüenza, escepticismo,
a universo de semblantes manchados.
 
Adentro es contar las sílabas, arrojar
otro soneto a la basura, previo
rictus de mandíbula descalza.
 
Afuera la certeza termina de
expulsar la última lágrima de la tarde,
con su estado de ánimo en suspenso.
 
Afuera, un timón hecho de arena
encalla un corazón decomisado en
un muelle de resacas perseverantes.
 
Adentro, sintaxis del silencio,
heredad abrupta de lo inútil,
primavera de huesos doloridos.
 
Adentro un par de manos tristes
arrojan un expediente contra
el fuego de la chimenea.
 
Afuera, la nostalgia se derrumba
imparcial, herética, minuciosa,
monótona pero nunca intransigente.
 
Afuera un café tibio se derrama
sobre un manuscrito plagado
de errores de ortografía.
 
Adentro, un eco con reloj atrasado
se pregunta a que hora se siembra el
azar en los días con desaliento.
 
Adentro, tos y tiempo son circulares,
se repiten, se deshacen, resucitan;
sin flores ni frutos, todo es atardecer.
 
Afuera el agua aprende a callar ausencias,
en un mediodía de llaves invisibles
y aspecto borrosamente circunspecto.
 
Afuera es una hoguera de proposiciones
apodícticas que no cumplen su
cometido de desterrar el frío.
 
Adentro, ocho de cada diez uñas
tienen espinas debajo, y una
historia enredada que no se deja llorar.
 
Adentro, las horas se suceden como
dinastías malditas; florece inefable
la pena hincando su mirada en lo incierto.
 
Afuera es una sombra pequeña y aislada ,
pretendiendo atenazar lo inabarcable de
un firmamento de oscuras transparencias.
 
Afuera, tarde de adultos sin adultos,
de poemarios con ceguera, de ciudades
oscilando entre el cinismo y la orfandad.
 
Adentro, letras de humo alternan
entre el abrazo y la vergüenza,
maniatando con tinta una metáfora.
 
Adentro una piel absurdamente
joven contiene un corazón que
se retuerce coloreando su tristeza.