Reinan telarañas sobre la mortal corona
aunque antaño joyas adornaran su cabeza
Fría hoja entre sus manos empuñada
insignia de honor de la consumida tumba
Cúpula húmeda sobre la tenebrosa catacumba
por recordar al esplendor palatino erguida
Ruinosos ajuares atestan las ruinas
pero solo el oscuro silencio las llena
Una regia faz que ya nadie recuerda
preside el olvido entre cien calaveras
Pues a todas ellas el polvo corona
a todas el polvo convierte en gemelas