Jota Isak

INQUINA

INQUINA

 

El desamor entona, grita, trina

y el amor se va con la brisa marina.

Un cantar en aguas ruidosas,

quedando tirado en la arena brumosa.

Escombro y muerte divina,

de un gran amor que termina.

Por el aire flota, letal emanación,

relámpagos radiantes de un corazón.

Hundido en un loco desenfreno,

la huella tímida del amor sereno.

Tantos recuerdos asombra

al alma e ilumina su sombra.

Un amor que culmina

tallando el recuerdo en el alma tan fina.

Guardando en apacible emparrado,

el recuerdo de un amor olvidado. 

El desamor calladamente avanza,

sin rencor y sin venganza.

Viaja, navega y no se retracta,

el olvido es una promesa que impacta.

Olvidar es el blanco de éste caminante,

que gira y gira frente al sol incesante.

El amor carcomido ya no engalana,

ceniza queda en su sombra vana.

Mientras que en el alma un triste lamento,

queda para levantarle un gran

monumento.

 

@odasalavida