Graciela Dantes

CAPACIDAD DE AMAR

Cuando Miguel Angel , finalizó

la estatua de Moisés, fue tan colosal,

que tomó un martillo y pegándole

en la frente, y con autoridad inaudita

le ordenó ¡ Habla!

 

Soy un ser humano , obra

de Dios, y a mí el martillo que me ha

pegado, es la indiferencia a las cosas

importantes de amor.

 

Hablo de la vida,  de la capacidad

de amar sin condición al ser humano,

a la naturaleza, a lo que nos rodea,

el amor es afecto,  una reserva que

 

no se termina. Si esto se practicará,

no habría pobreza, ni riqueza en un solo

bolsillo.

 

No quiero morir fundida en roca,

donde el burlón murmullo del viento

Se me pose como dueño. Quiero un

puño de sabiduria  de nobleza untada

 

de amor y repartirla en  el espacio

para que magicamente  toque a los

que no conocen el amor.