Es tu condena , creer que cambiarias el carácter de el, fue fuego quemando tu suerte pensando que iba volver, sus caricias fueron tan fuertes que dejaron marcas en la piel, tus ojos lloraron cuando se fue pero tú ya llorabas cuando estabas con el, así es la vida cruel, hoy los que te quisieron de verdad lloran por ti con la ilusión de que te fuiste feliz pues aquel hombre te había dejado partir.