No, ya no quiero poblar de nubarrones mi cielo, ya hubo bastantes tormentas,
No creas que todas mis canciones son para meterte en mi cama, mi vida
Que vuele solo y cante a capela, no significa que, este solo. No te confundas
no eres ese sol, donde gravitaba mi vida pasada, eres solo un triste pasado.
Ya no voy por los bares cantando mis canciones, como carnada de anzuelo
Tengo quien me aplauda, quien leas mis versos, quien deposite un clavel en mi solapa, Ahora tengo metas, sueños y proyectos. Nuevas canciones en mi vieja guitarra, deje de soñar a blanco y negro, de cantar llorando, Ahora rio cantando. Espante los buitres d emi estomago ahora son maripoas.
Ahora me amo un poco más, valoro hasta el polvo de mi caminar, no es que sea insensible, frio, despiadado. Me gusta compartir mis versos, mis canciones un vaso de vino, hasta mis ultimas rimas sin terminar. También comparto mi tarde como noche. No hay prisa. Mi futuro, puede ser hoy, mañana o quizá ni venga, solo espero. pero ya no me apresa la ansiedad de la punta de la desesperación. ¡NO!, ya no.
No tengo prisa, ni esta tan descompuesta mi vida, que la quiera arreglar en una noche,
No quiero volver al vaso de vino, tres canciones y unas caricias que me hieran y después,
otra vez al despecho, a la espera, al recuerdo, al temor de perder el corazón
La absurda monotonía de llenar con sexo la soledad de un cuerpo, olvidando el corazón.
Ya no soy el mismo, , ya no me conformo con cualquier canción, ahora escojo mis letras, no riño con la noche, ni me impresionan tus mañanas, no quiero volverme a equivocar por miedo, por temor a la soledad y creeme no es por orgullo, o vanidad, La marea me trajo hasta esta parte de mi vida. Donde estoy para elegir, no al revés. Mi encuentro con la noche , es solo un estado y la luz de plata de luna, solo mi traje.
LENNOX
EL QUETZAL EN VUELO