Verso libre y pasajero, poeta de mis sueños, añoranza de mis noches,
Que sean tus letras mi sustento, tuyas mis metáforas, nuestros los silencios
Para que vivas en armonía con EL, con tus hijas y en tu playa y que siempre
Tus letras como viento muevan mis alas y citarnos en el pensamiento.
Ya son muchas letras, tinta, vino y canciones, las que te llaman de diferentes formas. Son olores lejanos a playa, mar, sal, piel tostada por el sol en el lejano pensamiento, cuando la noche cae en tus vacíos y evocas el recuerdo de mis manos en tu piel, Llamas mis letras y mis canciones a que sacien tu ansiedad.
Ave libre, letra suelta, palabra al viento, ojalá que mis alas alcanzaran tus playas, Dejar para siempre el naufragio de mi cuaderno, la inconsistencia de la noche, La terquedad de la mañana que oscurece el verso silenciando la canción y aun no llegas y mi café se amarga y el pensamiento convulsiona.
Ven de nuevo, mis manos. Mis alas están a tu espera y una canción desespera.
Tu oficio es abogar, atiendes la desesperanza y haces justicia, buscas la libertad, sin embargo, este tiempo me es injusto y en la prisión del olvido, es una condena injusta, yo no te robe el corazón; ya estaba expuesto, sin dueño.
Volvamos a aquellas tardes de poesía, cuando disfrazabas tu amor, con bellas metáforas, exhibías tus fotos de goce familiar, laboral y la hermosura de tu ciudad. En metáforas ocultas decías que paseabas las tardes con mis canciones, despertabas con mis versos y el olor dulce de mis sueños.
LENNOX
EL QUETZAL EN VUELO