Llega hasta mi mente
El delirio de tus besos del ayer
Y Como un suspiro
Tus aromas me invaden el alma.
La hoguera echa ceniza
Se enciende con las llamas
Que me dejan tus encantos.
Tus gestos provocadores,
tus labios rojos,
Tu sonrisa blancs como un marfil,
Me hostigan, revuelven y despiertan
A ese hombre que fui
Cuando me tuviste a tu lado.
Brillan tus ojos cual preciado metal,
Y torpe voy a tu encuentro
Influenciado por la esperanza
De entiviarte entre mis brazos.