Mi sombra se desliza cual límpido torrente,
Por el lúdico cosmos, haz de etérea frente.
No sabe de campanas de bombas o vacíos,
No conoce tristezas ni dolores ni hastíos,
No está ligada a goces ni a vanos desvaríos
E ignora las fronteras, como lo hacen los ríos.
Se camufla en el negro fulgor en noche oscura
Cuando el amor se esconde en el mar de la locura.
Queda petrificada, grabada va en la mente
Como quedan los seres que habitan en los fríos
Polos do la tristeza riela en la extremadura.