En esta sutíl existencia
intercambio versos de poeta,
singular la noche en que despierta
le dedico palabras que no duelan.
En este plano ni los astros brillan
ni su grito quema,
porque el sol está de mi lado
y la vida tiembla cuando me nombras
en cada estrofa del poema.
Aquí la muerte ya no quiere morir
y me lee los cuentos que no encuentras
por miedo a sufrir,
la risa que baila
la pluma que vuela
y el alma que observa libre
y sin huír.
Si el universo no cree en la vida
y tú no crees en el amor
no encontrarás odas a medida,
no te sanará la llaga
ni te servirá la herida
para domesticar la rima
y la síntesis perdida.
Al otro lado de este poema
está la noche que despierta al poeta
y la leyenda sin amor que cuenta,
mientras construye mi existencia
con palabras y versos,
pues estoy al otro lado
de este mundo diverso.