Caminante,
no deja huellas.
Como el tiempo,
un minuto es una vida,
necesitas caminar tanto
basta una huella.
El amor no necesita tiempo,
ni huellas, solo el sentimiento
que abre sus alas,
y eleva tu vida hasta
después de la vida.
Las mariposas de tu jardín,
se cruzan entre flores,
El amor,
llega a tus pies,
se recoge como olas,
esperas una ola
que bañe tu cuerpo desnudo.
Amas el aleteo
de una mariposa,
como el amor,
a veces, el olvido.
¿Cultivas tu jardín?