Hoy cómo te extraño madre amada,
porque desde niño recibí tú cariño,
regaños y consejos; hasta hay días
que me enojaba, pero siempre
estaba contigo; estuve en las mala
y las buenas, y por eso tuve esa dicha
de cuidarte hasta tu vejez; por
eso extraño tus regaños, tus consejos
que aún los llevo en mis letras, en lo
más sencillo; porque aprendí de tí
y por eso no te olvido; tú eres
la causante de ser este hombre sencillo
y humilde. Siempre lo seré y de ti
por eso hasta la fecha no te olvido.