El sublime atardecer
Y la plácida mañana;
Esas nubes que en el cielo
Ya parecen pinceladas;
El suave aroma de ensueño
Que nos otorga la escarcha;
Y el retumbar de una gota
En la superficie plana.
Tantas cosas diminutas,
Pocas veces admiradas,
Que incluso siendo tan simples
Una vida entera abarcan.
Y son cosas tan comunes
Y a la vez tan ignoradas:
Es mirar hacia los montes
Y ver sus cimas doradas;
Es contemplar en el cielo
Todas esas pinceladas;
Un sublime atardecer,
Una plácida mañana…