Me he sentido sola, he sentido esas ganas irrefrenables de sentirme amada, deseada...
He encontrado en ti el fuego que está ausente en mí cama, y me has ofrecido una pasión ardiente, pecaminosa, prohibida.
Aún así la acepté, sintiéndome extasiada de deseos que tal vez algún día concrete contigo.
Por el momento, solo sueñame, escríbeme tus deseos, y hazme sentir totalmente plena.
Mí mente explora los increíbles placeres que me ofreces en cortos mensajes eróticos, y detonan en mí, infinitos orgasmos virtuales.
Amores platónicos, llenando esas camas frías y vacías... Nos complementamos, nos deseamos...practicamos el sexo ilusionandonos con algún encuentro furtivo, prometiendonos desalmarnos con caricias y sexo salvaje.
Por ahora, solo sueñame, sobre ti, saciando tu alma caliente, con deseos virtuales.
š„Reina Negraš„