Pyck05

JUEGAN LOS NIÑOS...

Juegan los niños
ajenos a la vida
en su inocencia.

Quiero ser niño,
decimos muchas veces
y con nostalgia.

Y es que despierta
el niño que llevamos
en nuestra alma.

Niños y niñas
jugando, indiferentes,
ante la vida.

Chicos y chicas
creciendo y madurando
año tras año.

Y en el otoño,
tan largo, de la vida,
algo se añora.

Es la niñez,
los días y las noches
interminables.

Allí, los cuentos,
los sueños y las risas,
eran frecuentes.

¡Bendita etapa,
pasada y que no vuelve,
más que en recuerdos!

Pero llevemos
al niño que añoramos
y que queremos.

Seamos niños,
no importen los otoños,
ni los inviernos.

Rafael Sánchez Ortega ©
26/09/22