“Bien fortificado, blindado . . .”
López en sus desatinos
mal desmanteló “Los Pinos”,
la casa presidencial
dizque por neoliberal.
Mas, su actuación fue ingrata
ya que se olvidó que el “Tata”
Lázaro Cárdenas, grande,
la edificó en un alarde.
De sensatez, de cordura,
al forjar la gloria pura
de México, su nación,
pero, que desilusión.
Andrés no habita “Los Pinos”
por sus deseos peregrinos
vive el lujo de Palacio
Nacional, goza su espacio.
Desde hace casi cuatro años
no se reciben extraños
en la vecindad del peje,
así está el tejemaneje.
Déspota se lo ha apropiado,
lo ha hecho suyo, lo ha expropiado,
ya nadie puede acercarse
como antes por él pasearse.
Nadie puede visitar,
ni apreciar ni disfrutar,
los cuatro museos que tiene,
Amlo solo se entretiene.
Ya lo puso amurallado,
cual fuerte, superblindado,
vallas, rejas lo circundan,
de esas que jamás se tumban.
Erguidas muy bien plantadas,
reforzadas y soldadas
le sirven de parapetos
enormes, miden tres metros.
Su miedo es de ese tamaño
no quiere que le hagan daño,
no da audiencia a las mujeres
no están entre sus quereres.
Ni a los que cáncer padecen
así sus temores crecen,
a las madres buscadoras
no da cita a esas señoras.
Pero, esto aquí no termina,
el ejército y marina
bien resguardan al “mesías”
lo miman todos los días.
Antes gritaba, exclamaba,
que el pueblo a él lo cuidaba,
López es decepcionante
tiene pavor delirante.
Autor: Lic. Gonzalo Ramos Aranda
Ciudad de México, a 27 de septiembre del 2022
Reg. SEP Indautor No. (en trámite)