Cuando contemplo el mundo
envuelto en tantos eventos
desalmados y violentos
siento un malestar profundo;
enfrentamientos tan burdos,
esos hechos tan siniestros,
amenazas y secuestros,
siempre hechos tan absurdos;
dónde quedó la hermandad,
el apoyo a los hermanos,
la nobleza y la bondad;
acaso ya nos olvidamos,
por tanta sangre y crueldad,
que para amar nos crearon...