Déjame irme,
no quiero tus besos.
Ahora ya es tarde
y no hay vuelta atrás
hacia tus brazos.
El tiempo ha pasado
no igual para todos,
y contigo de la mano
volaron los años...
Ahora aquí estoy
tratando de ocultar
mi enorme depresión
con más drogas
que me dejan solo
en mi sucio rincón.
Mientras tanto vivo
sin el código
mirando más allá de mi ombligo
con la ilusión de un niño
en mi recuadro
pensando en ti perdido
por tu rechazo,
colgando de un hilo tenue
que pronto se romperá
con mi corazón todo en mil pedazos.