Te miro y te deseo acá en mis brazos.
He soñado en vano tenerte conmigo;
entregado y reclinado en mi regazo,
como mi tierno amante, no mi amigo.
****
Para que negarlo, fuiste ese flechazo.
Un amigo que desde siempre bendigo.
Y, cuando en serio, te echo, un vistazo.
No puedo, ni quiero ser falsa conmigo.
****
Tus pasos me persiguen y son tu eco.
Qué más quisiera que estuvieras aquí,
en vano te busco y sé que, en eso peco.
Nunca te hablé de mí sentir y no mentí.
****
No me atreví, te percibí remoto y seco.
Hoy al verte de nuevo mi cariño reviví.
Susurrabas tus frases como un muñeco.
Mi alegría mostró lo que yo sentía por ti.