En este día la locura se despertó primero, hizo caso omiso al comienzo, no presto atención a las indirectas del destino y se lanzó de un clavado al agua, aprovechando el despertar perfecto, aprovechando al sol hirviendo, al calor intenso, a las aguas del amor que fueron tan turbias, a la providencia de un querer espléndido.
Un día del si a la locura sin cordura, un día del si en un día de octubre sin lluvia y con las ganas de perder la razón por un día sin pensar, sin tener la razón, sin tan siquiera imaginar si será bien o será mal, sin mente y con el pensamiento tostado, sin remedio alguno, como un día de esos donde la ley sea tomada prisionera.
Hoy el día esta desatado, tiene de capitán a una locura indomable dispuesta a sacrificar su estado de ánimo por un si empoderado, un día diferente, un día totalmente mágico, un día donde no hay un no por horas, y todo es un si inesperado.
Hoy la locura quiso tomar las riendas, y sin pensar en las adversidades le dice si a todo sin respuestas, sin preguntar ¿porqué y para que? Simplemente se aferra en tener la dicha de ser alocada y sin que le digan nada, simplemente sentirse viva por un día, por sí no hay un mañana.
Henry Ruiz
02 DE OCTUBRE 2022
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