MI ALMA YA TIENE DUEÑA
Procuro salvar siempre
el silencio de la noche eterna
cualquiera que éste sea,
si fuera tu silencio
te diría es por ella.
Fuise tú atormentada
con tus llantos de princesa
y aunque iba a tus encuentros
al final pensaba en ella.
Con el pasar de los días
sabrías cuanto te quise
y tu amor quedó en tormeta
como en el simple infinito
que el final nunca llega.
No dudé en descartar
de mi vida esa faena,
de meterte entre los dos
aunque siempre gane ella.
Fuiste lucero en penunmbra
de mis noches yerbabuena
ya no vivo esos recuerdos
tu pasión no es la de ella.
Lo que ayer fui para ti
no lo soy para ella.
No me importa que critiquen,
nuestras vidas son ajenas
si al final del precipicio
se arrojará aquel que quiera.
No sería yo el testigo
de cortar la flor primera
sino un simple espectador
de un suicidio cualquiera
que suceden cuando a veces
no hay mal que por bien no venga
ni tendría yo en mi mente
algún cargo de conciencia
diría que no quisiste
acompañar mi alma inquieta.
Cuando tienes un amor
no busques la referencia
indaga siempre tu interior
lo que tu corazón piensa
y nunca dejes apagar
la brasa que tanto enceder cuesta.
No me expliques, ni supliques
las razones de tu ausencia
cuando llegue será tarde
encontrarás mi amor de fiesta.
Seca tus lágrimas, no llores
que la verdad duele y cuesta
mucho más de lo que esperas,
porque la vida no frena
y otra estará en tu lugar
llenando el vacío que desprecias.
Cuanto siento dejarte
nos veremos a la vuelta
porque todos moriremos
sabemos que nos espera
mientras tanto a disfrutar
de una vida mas plena
y aunque te burles de ella
a lo tobillos no llegas
Ella me da su amor
y le bajo cielo, luna
Sol y estrellas
Viviremos un idilio
al compas de tus querellas
Lo siento, no soy tuyo
mi alma ya tiene dueña.
Justo Aldú
Panameño
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