No se si la vida continuará siendo cómo hasta ahora si te vas, no se si no me romperé en mil pedacitos cuando llegue la noche y no te encuentre a mi lado para refugiarme en tus brazos y así yo poder sentir tu corazón latir, pues no se si no me derrumbare y me hundiré en mis propias lágrimas hasta que mis ojos declaren sequía y me duerma soñando contigo.
Claro está que no me amas, que a tus alas le urgen despegar, sin importar que sí te vas me matas. No puedo hacer nada para detenerte lo sé, claro está que tú no me quieres y que no puedo querernos por los dos.
Y me aterra el mañana sin ti, siento que me golpeará tu ausencia y el recuerdo me apuñalará cada vez que se haga de noche; a altas horas de la madrugada, con el insomnio y la soledad. Gritando tu nombre, rogándote que vuelvas por mi, y aquellas memorias bonitas que hemos vivido se convertirán en pesadillas y dolor, cuando me castigue en el piso, al lado de nuestro sillón, con Soda Stereo de fondo, una botella de wiski y vodka, el humo de un cigarrillo encendido, mis lágrimas paseando por mi cara y las ganas de verte llegar a casa.
Pues no puedo si tú te vas.