Alma D. Angeles

Flaco

 

Ayer sobre su regazo me acordé de ti.
 
Flaco, mi Flaco hay días donde te extraño menos, pero son muchos donde te extraño más.
 
Y es qué Flaco, ya te busqué en otros cuerpos, en otros labios, en otras bocas, en otras vidas.
 
Flaco, han pasado muchos años y aún tengo la medida exacta de tu cintura y de tu pecho aquí en mis brazos.
 
Flaco los otros no son como tú, no tienen tu fuerza, ni tu olor, tampoco son tú.
 
¡Ay Flaco! Ven, no me canso de esperarte, podría hacerlo una eternidad más si tu quisieras.
 
Ayer en sus ojos mientras le besaba, toque sus manos, toque su rostro y no eras de nuevo tú.