GBirĂș

Vuelo

Me enamoré al verla volar
brillando alto,
indiferente
un aguila dueña del cielo
acepté pasear en sus alas
siguiendo los pasos
de su poesia y su locura
combinada con la mía,
incendiamos las estrellas.
La admiré de lejos
cuando quiso ir,
la acogí
cuando quiso venir
nos miramos,
nos juramos,
nos amamos
quisas demasiado. 
Mismo las aguilas
sufren el vertigo
y temen el abismo,
que son mi adicción.