Sí, lo maté al amor en tí, porque
era un mal recuerdo, por eso ya está
en el pasado. Hoy vivo felíz sin tu amor he ingratitud; solo quiero
que no regreses, porque no vale
la pena volverla a revivir, ya para
qué, si solo soy felíz con una damita
que con su ojos negros, ha vuelto
a renacer con su pasión de amor.